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| Jeune Femme en Buste à la Couronne de Mandarines |
Era la hija del pintor , Stephane Sonrel, de quien recibió su orientación artística a principiosRenoir Fine Art
o continuar sus estudios artísticos que se trasladó a París donde se convirtió en la pupila del artista famoso de la historia de Jules Lefebvre en la École des Beaux-Arts. El museo posee sus giras de trabajo de diploma, Pax y Trabajo, que se ejecutó en 1892 a la edad de 18 años y muestra cómo tremendamente precoz que era.
Ella mostró en el Salón de Artistas Franceses en París desde 1893 hasta 1941, especialmente grandes acuarelas de Botha mujeres idealizadas que tienen alguna intensidad prerrafaelista (desde un viaje en Italia, a Florencia y Roma, donde descubrió los pintores del Renacimiento, que Profundamente admirado Botticelli) y afinidad con la pintura francesa simbolista años. Se inspiró en la novela artúrica, temas bíblicos, arcaicos leyendas medievales y de amor. Algunas de sus obras místicas son Ames Errantes (Salón de 1894) y los espíritus del Abismo (Salón de 1899) y un tapiz de la mujer joven que tiene inspiración años cerca de la famosa Maxence simbolista. Ella no obstante conforme con el movimiento simbolista que, además, totalmente ignorado.
Su pintura El sueño de la Virgen (1895) era bien conocido en SU TIEMPO-a través de reproducciones y apareció en la Exposición Universal de 1900. Algunas pinturas de ella (la música, colección particular, Londres) evoca las criaturas evanescentes del Art Nouveau de la que ADOPTADO A veces los adornos y las joyas.
Después de 1900, pintó retratos y paisajes pintorescos Breton principalmente, y las flores de vez en cuando. Su última exposición en el Salón de 1941 fue cuando ella tenía 67 años de edad. Ella aussi de haber exhibido con los registros en el Liverpool.
Aunque Elizabeth Sonrel fue durante toda su vida conocida, especialmente a través del número de pinturas reproducidas, sólo en los últimos 20 años más o menos que su trabajo ha recibido de nuevo el enfoque que se merece. Ella murió en Sceaux en 1953.
Aunque casi todas tienen su encanto, si he de elegir una de las imágenes, me quedo con la primera. con esa muchacha absorta en sus pensamientos y esa calle solitaria.
ResponderEliminarUn saludo.